Elementos fuertemente armados de la Guardia Nacional mantienen resguardada la entrada del domicilio del senador morenista y exgobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, ubicado en el fraccionamiento Campanario de la capital del estado.
De acuerdo con imágenes difundidas, al menos cuatro efectivos se encontraban apostados frente a la vivienda portando armas largas, chalecos balísticos, cascos y uniforme táctico completo. A un costado, se observa una unidad oficial de la corporación estacionada sobre la acera opuesta.
La presencia de la Guardia Nacional ha generado inquietud entre algunos vecinos del residencial, quienes han manifestado su preocupación por el despliegue de seguridad en una zona habitualmente tranquila.
Hasta el momento, las autoridades federales no han emitido un posicionamiento oficial sobre los motivos del resguardo, sin embargo, existen versiones no confirmadas que relacionan el operativo con un incidente ocurrido meses atrás en el Aeropuerto Internacional “Roberto Fierro” de Chihuahua, donde Corral habría sostenido una discusión acalorada con el empresario Eduardo Almeida, hecho que circuló en medios locales.
Cabe recordar que en agosto de 2024, el fiscal Anticorrupción de Chihuahua, Abelardo Valenzuela Holguín, declaró a Javier Corral prófugo de la justicia, luego de que fracasara un operativo para ejecutar una orden de aprehensión en su contra en la Ciudad de México.
La acción judicial derivó de una investigación en curso por presunto peculado cometido durante su gestión como gobernador de Chihuahua (2016-2021).
Dicho intento de captura se vio obstaculizado por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, que se negó a colaborar con las autoridades de Chihuahua, lo que impidió la ejecución de la orden. En respuesta, Corral promovió en diciembre del mismo año un amparo ante el Juzgado Quinto de Distrito en Materia Penal en la CDMX, donde obtuvo una suspensión provisional que le protege de ser detenido mientras se resuelve de fondo su situación legal.
La aparición de la Guardia Nacional en su residencia ocurre en un contexto de tensión política y judicial, marcado por acusaciones cruzadas entre Corral y actores políticos locales.
El exmandatario ha sostenido en diversas entrevistas que las acusaciones en su contra tienen un trasfondo político, y ha negado rotundamente los señalamientos de corrupción.
Mientras tanto, el resguardo de su vivienda sigue sin explicación oficial, alimentando la especulación tanto entre la opinión pública como en el ámbito político estatal.
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