El secretario general de la ONU, António Guterres, señaló durante la cumbre previa a la COP30 en Belém, Brasil, que la comunidad internacional “ha fallado frente al calentamiento global” y afirmó que la falta de acción en décadas anteriores ha derivado en “impactos ambientales visibles y crecientes”.
Guterres sostuvo que los gobiernos aún pueden reducir daños si aceleran medidas como la eliminación paulatina de combustibles fósiles y reconoció que este proceso “requiere acuerdos y acciones coordinadas a nivel mundial” para disminuir emisiones y evitar impactos de mayor escala en los próximos años.
Por su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, llamó a separar las tensiones políticas actuales de la urgencia climática tras considerar que los conflictos armados y disputas estratégicas “desvían recursos que deberían dirigirse a enfrentar el calentamiento global”.
Lula señaló también que campañas de desinformación generan percepciones erróneas sobre la crisis climática.
Más de 50 líderes participan en esta reunión previa al inicio de la Conferencia de las Partes la próxima semana.
Lula afirmó que existe “una distancia entre el diálogo diplomático y la realidad cotidiana de las comunidades que viven los impactos climáticos” e indicó que las personas no necesariamente comprenden métricas técnicas, pero sí perciben los efectos de la contaminación.
